EL PERIÓDICO MEDITERRÁNEO Artículo opinión 13/11/2022
EL CIBERACOSO
Cada día hay miles de niños que sufren, a través de internet, lo que se conoce como ciberacoso o ciberbullying. Las nuevas tecnologías se han convertido en una forma común de acoso a menores de edad en sus múltiples formas. Un reciente estudio asegura que uno de cada cuatro alumnos en España, asegura conocer a alguien de su entorno, que ha sido víctima de un ciberacoso. Existe la creencia errónea de cómo es el perfil de un acosador online, en base a ideas preconcebidas, pero lo cierto es que no hay uno concreto, puesto que cualquier menor con acceso a un dispositivo puede acabar convirtiéndose en un acosador, o incluso formar parte de este tipo de actos sin siquiera ser muy consciente de ello. Así, 1 de cada 4 menores reconoce haber participado en un caso de ciberacoso, sin darse cuenta. Y es que dar un me gusta a un comentario ofensivo o reírse de un ataque en la red, es una forma de meterse en la espiral de ciberacoso como parte acosadora, por mucho que esto cueste de entender. Los menores que ejercen de acosadores creen que son indemnes en la red, por lo que es esencial concienciarles de que están cometiendo un delito y de que sus actos tienen consecuencias. Se han encontrado unos patrones básicos de cambios en la personalidad de la víctima, como consecuencia de una situación de ciberacoso: resignación, sensación de permanente nerviosismo y sentimientos de indefensión. Una manera de prevenir es realizar una buena educación digital, tanto por parte de la familia como de los entornos educativos. Y otro papel clave lo deben desempeñar los que lo presencian, que deben de intervenir para no convertirse en cómplices. No podemos olvidar que existe un terrorífico informe de la OMS que dice que, cada año, en todo el mundo, el ciberacoso lleva a más de 200.000 jóvenes, de entre 14 y 28 años, al suicidio. www.carloshidalgo.es